Llamado “oro líquido” por sus propiedades cosméticas.
Contiene un alto porcentaje de ceramidas muy similares a las de la piel y el cabello, que protegen la barrera cutánea y contribuyen a mantener la homeostasis de la piel. Además, tienen un papel central en el fortalecimiento del cabello, ya que protegen a las fibras capilares de los agentes externos que pueden dañarlas, como el clima o la exposición a herramientas de calor. La falta de ceramidas puede causar resequedad y volver el cabello frágil, quebradizo y con puntas abiertas.
La jojoba contiene también cantidades significativas de tocoferoles (VITAMINA E), que le confieren propiedades antioxidantes para combatir los radicales libres, y ácido linolénico, indispensable para la adecuada regeneración celular. Entre sus propiedades, se destacan, además, su capacidad lubricante, humectante, calmante y antiinflamatoria.
Es un aceite muy ligero, de tacto seco y de rápida absorción. No obstruye los poros, ayudando a regular la producción de sebo y humedad.
USOS RECOMENDADOS
En tu rutina facial, es un excelente aliado para usar luego del suero y antes de la emulsión, también podés usarlo para remover maquillaje antes del gel, y como complemento para una rutina de masajes.
Apto para cualquier tipo de piel, no deja sensación grasosa. Recomendable para tratar el acné gracias a sus propiedades antisépticas, antiinflamatorias y antimicrobianas.
En tu pelo, utilízalo junto al tónico capilar, con el cabello húmedo, y junto a la henna hará maravillas para devolverle el brillo y la vitalidad.
Si el cabello está seco, sin vida, sin brillo…podes usar 3 a 5 gotas y colocarlo en la zona deseada (cuero cabelludo, melena o puntas), o bien, mezclar un poquito con el shampoo.
Si tenes pies hinchados, con durezas o secos, el aceite de jojoba es ideal. Aplica unas gotas y acompaña con un masaje.
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Presentación: Gotero de vidrio 100ml.
Ingredientes: Simmondsia Chinensis (Jojoba) Seed Oil. Prensado en frío.
