Carbón activado de cáscara de coco. Detox, blanqueador dental, higiene facial y digestivo natural.
Producto vegano y libre de gluten.
El carbón activado es un producto de origen vegetal y tiene la propiedad de adsorber moléculas orgánicas mayores a 55. La capacidad de adsorción de un carbón activado está entre un 20 y un 90% de su propio peso. Por esta razón resulta ser muy importante para la desintoxicación.
El carbón de cáscara de coco es el más microporoso de entre los que se encuentran en el mercado; a mayor microporosidad, mayor poder de adsorción.
Limpia las toxinas, y tiene la capacidad de depurar de virus estomacales desagradables. También es apto para reducir el colesterol, problemas de flujo de bilis, es seguro durante el embarazo e incluso se utiliza para prevenir la resaca.
Beneficios destacados:
El carbón activado es una gran ayuda en terapias de desintoxicación —especialmente del colon—, además es el componente principal en varios productos que se usan para realizar diferentes procesos de desintoxicación.
- Depurativo corporal
- Blanquea los dientes de manera natural
- Limpieza facial
- Úsalo como antiácido, antidiarreico y antiséptico
- Desinfecta tus frutas y verduras
- Combate alergias en la piel y picaduras de insectos
- Uso gourmet en alimentos
- Ayuda a prevenir virus y bacterias
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Presentación: Envase de 50grs
Ingesta recomendada: 1 cucharadita de té (4grs aprox.)
Algunas sugerencias de uso:
- Añadir una cucharadita a un vaso de agua, para eliminar toxinas. - Añadir en tu cepillo de dientes y cepillas, para blanquear.
- Mascarillas faciales caseras para eliminar puntos negros.
- Oral: Las dosis varían según la afección o los síntomas de una persona. Para la descontaminación gastrointestinal en hospitales, los médicos pueden prescribir entre 50 y 100 gramos. Para los gases intestinales, la dosis puede oscilar entre 500 y 1000 mg por día. Se recomienda una dosis diaria más baja de 4 a 32 gramos para reducir los niveles de colesterol.
Algunos médicos o médicos naturópatas pueden recetar carbón activado para que se tome una o dos veces al día con fines de desintoxicación. Separalo de todos los alimentos, medicamentos y suplementos que consumas. Tomarlo con una o dos horas de diferencia de todo lo demás asegura que el carbón se una a las toxinas en lugar de a los alimentos o medicamentos.
Se prepara mezclando el polvo en poca agua, hasta formar una pasta en la que usted observe que el carbón está bien mojado. Luego se llena el vaso con agua y se bebe.
Es mejor tomarlo entre comidas, pero no abuse de su uso, puede provocarle síntomas carenciales, por absorber de los alimentos los nutrientes que necesita.
- Cataplasma: Se mezcla el polvo con agua hasta obtener una pasta, que se puede mezclar con almidón. Se extiende la mezcla sobre la mitad de un trozo de tela o papel, y se dobla la otra mitad sobre ella de tal forma que quede cubierta por la tela o el papel de ambos lados. Esta cataplasma se coloca encima de la parte del cuerpo sobre la cual desea actuar. Cubra la cataplasma con un trozo de bolsa de plástico para que no se seque.
Origen: Argentina
Contraindicaciones: Puede utilizarse en embarazo y lactancia. Igualmente se recomienda consultar al médico previamente y ante cualquier duda. No se recomienda utilizar para desintoxicar por más de 10 días seguidos. Ver la dosis sugerida, no excederse de la misma. El consumo excesivo de carbón, especialmente sin magnesio, puede provocar estreñimiento y alteraciones intestinales. Tome 300-400 mg de gluconato de magnesio aproximadamente 3 horas después de tomar carbón y tome mucha agua para evitarlo.
Observaciones generales: El carbón activado NO debe consumirse al menos 1 hora antes o 2 horas después de tomar medicamentos o vitaminas, ya que es un absorbente muy potente y puede influir en el efecto de estos. Es mejor no aplicar el carbón directo sobre la piel en caso de cortadura o herida, pues puede quedar como un tatuaje. Al administrar carbón, hay que tomar las debidas precauciones para evitar broncoaspiración ya que, en el 10% de los casos, se induce el vómito involuntariamente. El carbón activado se contraindica en caso de intoxicación con solventes orgánicos alifáticos (entre estos se encuentran los solventes orgánicos que normalmente utiliza la sociedad, fuera de las empresas), no porque no los adsorba, sino porque éstos se absorben muy poco en el tracto gastrointestinal, resultando así, poco tóxicos. En cambio, si se presenta vómito, la broncoaspiración sería causa de una lesión que puede ser grave o fatal. Es obvio que también se contraindica la administración de carbón activado en casos de ingestión de sustancias corrosivas (ácido muriático, líquido de baterías) y cáusticas (lavandina o lejía, amoniaco). No sólo por el hecho de que son sustancias poco adsorbibles (inorgánicas, iónicas en medio acuoso y de bajo peso molecular), sino porque el carbón dificultaría la endoscopía y la limpieza en la intervención post-traumática.
Mantener en lugar fresco y seco. Ante cualquier duda consulte a su médico.
